miércoles, 6 de octubre de 2010

Capitulo 20. Definitivamente el tiempo no cura todas las heridas.

Capitulo 20
Definitivamente el tiempo no cura todas las heridas.


Ya pasaron tres meses desde que pasó todo eso con Justin.
No lo extraño. No lo necesito. O de eso me quiero convencer.
Todavía me duelen un poco las heridas abiertas que dejó en mi corazón. Las palabras que dijo… y las que no dijo también.
Porque lo quise… ¿Quise? No mientas Lizzie, lo quiero.
Mi mamá y mi papá siguen horriblemente peleados (como siempre) y ya no puedo más. Es horrible.
Lo bueno: ¡conseguí trabajo!
(Aunque, claro, no sea nada comparado con las cosas horribles que me estuvieron pasando.)Es después del colegio. En un supermercado. No pagan mucho, pero voy haciendo mis ahorros, eso es lo único bueno que me pasa últimamente.
Bueno, hablando de eso, es hora de ir a trabajar.

Me cambié y me puse el uniforme de trabajo (una pollera roja por las rodillas y una musculosa blanca con el nombre del supermercado).
Al principio no había querido aceptar el trabajo por la ropa. Me negaba rotundamente a usar una pollera. Luego accedí, pensando en que hay pocos trabajos en los que se aceptan chicas de 15 años.
Me terminé de arreglar bien para ir y cuando llegué fui a mi puesto, entre las cosas de música, DVDs, CDs, reproductores y hasta televisiones (aunque eso no sea con música).
Estaba de espaldas, ordenando unos CDs que un nenito de aproximadamente 5 años había desordenado. De repente alguien me toca el hombro.
- ¿Podría decirme el precio de este CD, por favor? -preguntó una voz de chico-
Me di vuelta y casi me desmayo al ver quien era.
- ¡Justin! -dije, asombrada, como él-
- Mmm… no sabía que trabajabas acá.
- Es que… empecé hace poco -se hizo un silencio incómodo, ninguno de los dos quería que el otro hable sobre lo que había pasado meses atrás-.
- No te veía desde… -bueno, por lo menos, yo no quería hablar de eso-
- Desde el día que te dije que no te quería ver más -completé la frase, bajando la cabeza para no tener que verlo a los ojos-.
- Te… te extrañe bastante… Estuve pensando en vos en este tiempo -dijo-.
- Tu novia se enojaría -dije apretando los dientes y los puños y dándome vuelta otra vez para seguir ordenando-.
- Basta, no podes seguir enojada toda la vida. ¿Esta es tu forma de arreglar los problemas? ¿Esquivando a la persona? -preguntó molesto-
- ¿Y tu forma de conquistar una chica es engañándola? -pregunté mordaz-
- ¿Y que si es así? ¿Funciona? -preguntó acercándose a mi provocativamente-
- No. Conmigo no -me alejé, sintiéndome lo más-.
- Ahora en serio -me alcanzó y me tomó del brazo-. No te quiero perder como amiga, porque… -se calló-
- Porque… -dije, alentándolo para que siga-
- Porque te quiero y aprecio mucho tu amistad -soltó rápidamente, bajando la cabeza avergonzado, pero supuse que no era eso lo que quería decirme-.
- Que bueno…
- Entonces… ¿Me perdonas? ¿Podes volver a ser mi amiga?
- Con una condición -dije seria-
- ¿Cuál? -preguntó temeroso-

Capitulo 21, adelanto

- Bueno, tengo que volver a trabajar… ¿Nos vemos?
- Nos vemos -sonrió-
Volví a donde estaba ordenando y él se fue. Olvidándose completamente del precio del CD que me iba a preguntar. Y yo olvidándome completamente de que en esos momentos debería estar trabajando en vez de estar pensando en él.

- Te quería explicar sobre lo de Caitlin -dijo, sacando el único tema que yo no quería que él saque-.
- Uyy… otra vez con eso… -suspiré, dándole a entender que ya había pasado, que ya estaba todo bien- No hace falta, Justin. No necesito que me expliques nada. No somos novios. En el momento me enojé, pero ya está todo bien.

1 comentario:

  1. PAULI SI NO HACES LOS CAPÍTULOS MÁS LARGOS VOY A EXPLOTAR!!! NECESITO LEER MÁS

    ResponderEliminar